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- Contenido original: The New York Times

El año 2020 estuvo marcado, en todo el mundo, por las protestas contra la violencia policial, a menudo cometida sin la debida identificación de sus agentes. En la lucha contra este "anonimato policial", los activistas están haciendo uso de herramientas de reconocimiento facial y logran identificar a los agentes que cometen estos excesos, en una especie de "conjuro contra el brujo", que ha suscitado una serie de preguntas y la desaprobación de las autoridades.